En la década de los 90, los merengues contagiosos de Pochy Familia y su famosa “Coco Band” se apoderó de la radio, lugares emblemáticos de entrenamiento en República Dominicana y demás.
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Pochy era ese artista que no podía salir a la calle sin ser acosado por sus fanáticos que quería un autógrafo o una fotografía, pero llego un momento en donde esa luz se fue apagando.
Sus fanáticos se preguntaban dónde estaba la fuente de buena vibra que era Pochy y su clan, otros se preguntaban si él había acumulado una fortuna y decidió retirarse.
Luego de cumplir la mitad de un siglo vivido, más maduro, padre, marido, habló sobre su caída el mejor momento de su carrera en medio de un almuerzo entre amigos.
“Pocos saben la historia de mi retiro, de mi encierro y de mi desaparición del ojo público, muchos preguntan por qué perdí una popularidad cuando estaba en la cima de mi carrera”, dijo Ponchy mientras ordenaba una bebida.
“Mi hermano Evel Augusto era la parte más importante de mí, éramos uña y carne, era mi otro yo, él era todo para mí. Un día de golpe nos enteramos que tenía cáncer de páncreas, fue devastador para mí. Murió a los 21 años y con él se fue mi vida entera”, cuenta el artista.
La muerte del hermano de quien fundó la Coco Band fue la razón por la cual se exilió, Pochy confesó que no supo lidiar con esa situación.
El nacimiento de su hijo hace 4 años, le dio esperanza a el artista.
“Desde ese momento que muere mi hermano en mi casa jamás se volvieron abrir las ventanas, ni las puestas, era un encierro total, yo no existía, en medio de todo eso algo bueno paso, deprimido y todo me refugié en la universidad y empecé a estudiar, hoy soy abogado con muchas maestrías realizadas”, “Mi hijo Evel Alfonso con ese nombre en honor a mi hermano llego a mi vida para cambiar mi mundo, y convertirme en el ser que soy hoy, la primera persona que abre al levantarse todas las puertas y ventanas de la casa y poner todo en su justo lugar”, expresó Pochy. Si se puede ¡COMPARTE!
fuente: orgullodominicano