El conocido artista urbano puertorriqueño Cosculluela festeja este jueves sus 40 años, destacándose como uno de los intérpretes que más refleja en sus canciones la vida callejera o «malianteo», como se le conoce en el movimiento musical.
De padre cubano y madre puertorriqueña, José Fernando Cosculluela, practicó cuando niño de manera recreativa tenis y golf, y en varias ocasiones representó a su escuela en diferentes competencias.
PREFIRIÓ LA MÚSICA SOBRE LOS DEPORTES
No obstante, el joven Cosculluela se inclinaba más por la música, por lo que junto a su hermano, Jaime, y varios de sus amigos, comenzó a hacer «mixtapes» de canciones, buscando la oportunidad de que algún productor o artista le abriera las puertas en la industria musical.
Y en la mayoría de esos temas, el llamado «Príncipe del verso», contaba como un cronista las vivencias que personas del bajo mundo experimentan a diario para subsistir de sus problemas económicos.
El joven José Cosculluela, sin embargo, decidió ingresar en la universidad, donde consiguió terminar un bachillerato y después trabajar en un banco local.
DON OMAR LE BRINDÓ SU PRIMERA OPORTUNIDAD
Pero, la música aún era su pasión, y a la espera de la gran oportunidad musical, que entonces llegó, cuando el reconocido reguetonero puertorriqueño Don Omar lo incluyó en su disco «Los Bandoleros» (2005) con el tema «Vamos a darle».
Luego, Cosculluela, ahora con más de 8,3 seguidores en Instagram y 5,3 millones en Spotify, participó junto al rapero Getto en el disco «Buddha’s Family, Vol. 2: Desde la Prisión», en el tema «Te va a ir mal».
Desde este momento, Cosculluela comenzó a consolidarse entre los principales cantantes del género urbano, al ser invitado a cantar en otros álbumes como «Los Bandoleros: Reloaded», «Invasión», «Gárgolas», «Los bravos», «El Pentágono», «El Pentágono Return» y «Los Brothers», entre otros.
Incluso, Cosculluela también fue invitado a participar a cantar en el tema «Entre el Bien y el Mal», incluido en el último disco de Héctor «El Father», «El Juicio Final» (2008).
Así, labrando su carrera, Cosculluela lanzó en el año 2009 su primer disco en solitario, «El Príncipe», que tuvo de invitados a Ivy Queen, De La Ghetto, y los dúos de Jowell y Randy, y Zion y Lennox.
Temas como «Prrrum», «Na na nau», «Click clack», «Dime con quien andas», «Dividiendo bandos» y «Plaka plaka» le brindaron a Cosculluela un gran apoyo entre los seguidores del género urbano, pero especialmente a los aficionados de los temas callejeros.
Un año más tarde del lanzamiento de «El Príncipe», Cosculluela publicó «El príncipe, Ghost Edition», su segunda producción.
COSCULLUELA TAMBIÉN SE DESTACA EN EL REGUETÓN
No obstante, Cosculluela también se ha consagrado en temas bailables de reguetón, entre ellos, «A donde voy», junto a Daddy Yankee, que logró una nominación a un Grammy Latino como «Mejor Canción Urbana».
Además de «El Príncipe» y «El Príncipe: Ghost Edition», otros discos que ha lanzado Cosculluela son «El Niño» (2011), «War Kingz» (2012) y «Blanco Perla» (2016).
PROBLEMAS CON LA JUSTICIA
Pese al éxito que consumía, Cosculluela también ha estado vinculado con situaciones legales, específicamente con su exesposa Gina Moreno.
Según reveló Moreno en el año 2013, su exesposo abusó de ella sicológica y físicamente.
Incluso, Moreno admitió que las tensiones le provocaron abortar naturalmente en uno de sus embarazos.
Los problemas matrimoniales entre Coscuella y Moreno continuaron en los años siguientes, específicamente en el 2015, cuando el artista fue acusado de robo y violencia doméstica.
LAS RIÑAS ENTRE COSCULLUELA Y SUS COLEGAS
Cosculluela, a su vez, también ha sido uno de los protagonistas de algunas «guerras liricas» o «tiraeras» -como se le conoce en el género urbano- contra sus colegas Ñengo Flow, Tempo, Anuel y Kendo Kaponi.
Este año, incluso, Cosculluela amenazó con «tirarle» al también rapero Residente, pero nunca se concretó.
Cosculluela también ha sido crítico de situaciones sociales, cuando denunció los actos vandálicos que provocaron algunos manifestantes que se enfrentaron a decenas de policías durante las protestas que se llevaron a cabo el verano del 2019 para pedir la renuncia del entonces gobernador de Puerto Rico Ricardo Rosselló.